La simulación fluidodinámica tiene aplicación en múltiples sectores, y uno de ellos es el sector naval.
Los usos son muy variados, yendo desde el cálculo de la resistencia al avance de una embarcación a la simulación de maniobras.
Una de las principales ventajas de aplicar simulación, es que podemos obtener más información de la que obtendríamos de un canal, en menos tiempo y sin necesidad de fabricar un prototipo a escala. Esto tiene una gran utilidad principalmente en las fases de diseño, ya que permite validar diferentes configuraciones de forma rápida.
Gracias a las herramientas de CFD podemos evaluar la capacidad de maniobra de un buque en las fases de diseño sin tener que realizar costosos ensayos.
Este tipo de simulaciones, no son aplicables únicamente en la fase de diseño, también es útil para poder llegar a las pruebas de mar con la seguridad de que la embarcación cumple. Esto es muy interesante no sólo por el ahorro económico al no tener que repetirlas, sino también a nivel reputacional, ya que esas pruebas se suelen llevar a cabo en presencia del armador.
En el video mostramos un ejemplo de la simulación del ensayo de Zig-Zag, aunque existe la posibilidad de realizar la simulación del círculo de evolución, la espiral, estabilidad de rumbo, «pull out» o cualquier tipo de maniobra.
